miércoles, 21 de octubre de 2009

Donde las dan las toman


Salgo del trabajo cuando está cayendo el día y entro a la farmacia habitual. Tras una corta espera me atiende la atractiva farmaceutica; en esta ocasión su comportamiento es distante y profesional: me sirve envuelto en papel el medicamento que solicité y, con la vuelta, me da las gracias, seca, seria, casi gélida. Mi mente empieza a cavilar: ¿Habrá leído en mi rostro que hice caso omiso a los consejos publicitarios que me habría proporcionado? ¿Tendré el pequeño problema y no me habré enterado, pero mi lenguaje no verbal lo irá contando a todo el mundo?. Abrumado por esos pensamientos continuo caminando en esa agradable tarde otoñal y llego a la plaza del Fontán, entro en la biblioteca y, en la segunda planta, avisto a L.S. tras la cristalera, enfrascado en la consulta de archivos en un ordenador, seguramente ediciones antiguas de La Nueva España, en busca de esquelas o noticias relevantes. Aprovecho el momento de concentración para sacarle un foto a traición y así logro vengarme de Buridán.

1 comentario:

  1. ¡Mis felicitaciones a Gustavo por haber nacido en el Pueblo Ejemplar de Asturias, Premio Príncipe de Asturias 2009! (Aunque yo sea republicana, qué le vamos a hacer...)
    Y un abrazo

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